La exposición Convertir una palabra en sombra presenta una serie de obras de diversos años de producción bajo el concepto de la sombra, la luz y el tiempo como materiales de trabajo. Dibujos, instalaciones y esculturas proyectadas en el espacio se presentan como un texto espacial monocromo y sensorialmente dinámico que cuestiona la literalidad de las formas y los usos convencionales de la luz.
Mientras que la cultura occidental tiende a enfatizar la luz como símbolo de verdad y revelación, la oriental celebra la sombra y el vacío como elementos esenciales de la belleza y la sabiduría. Esta exposición se posiciona en la bisagra de ambas culturas, en una suerte de dualidad, las obras buscan la complejidad del espacio, del conocimiento y la profundidad del pensamiento, situando al espectador en una espacio de reflexión sobre lo aparente y a aquellas experiencias fugaces propias del tiempo.
“No se puede tratar de cuanto sabemos, debemos pensar en que tenemos por descubrir. Creo que toda experiencia vibra en lo desconocido y nuestra única certidumbre es el irremediable nuevo acontecer de las cosas” afirma el artista. Derroteros, para recorrer otro tiempo posible, una sombra capaz de ser habitada. Sobre aquello en Oriente en 1933, Tanizaki escribe: “los reflejos no están hechos para ser vistos a plena luz, sino que deben ser adivinados en la penumbra como rayos misteriosos, agitados por el tiempo. Invitando a quien habita el espacio de la imaginación, a desconectar la certidumbre para entrar al terreno de la ensoñación”.
En Occidente, 36 años después Jorge Luis Borges con casi 70 años de edad y una ceguera avanzada, publica un poemario titulado Elogio de la sombra, que apunta a la incapacidad de ver como una vuelta al origen, a la ceguera confusa de los primeros haces de luz, la vuelta cíclica de la vida donde pareciera que la razón habita en la sombra. “Llego a mi centro, a mi álgebra y a mi clave, a mi espejo. Pronto sabré quién soy” concluye Jorge Luis Borges en Elogio de la sombra 1967-1969.
Convertir una palabra en sombra es la tercera exposición individual del artista chileno Benjamín Ossa, después de 10 años de trabajo con galería, el artista presenta una gran exposición en ambos niveles de la nueva sala de la galería ubicada en calle Paraguay 675.