No pienso que el hombre tenga la más mínima posibilidad de arrojar un poco de luz sobre todo eso sin dominar antes lo que le aterroriza. No se trata de que haya que esperar un mundo en el cual ya no quedarían razones para el terror (…). Se trata de que el hombre sí puede superar lo que le espanta, puede mirarlo de frente.
Georges Bataille, El erotismo
En una sociedad que tiende a sanitizar y estetizar las expresiones culturales, el artista Víctor Hugo Bravo emerge como una voz discordante, desafiando los paradigmas convencionales a través de su obra provocativa y visceral. Su investigación revisa, cómo elementos subjetivos, abyectos y corrosivos en la visualidad de sus creaciones operan como formas de resistencia política, generando una trinchera crítica frente al sistema actual del arte.
Por: Danila Desirée Nieto, Argentina
Desde una perspectiva crítica, Víctor Hugo Bravo cuestiona y confronta los procesos de higienización dentro del campo social y el sistema artístico contemporáneo. Su trabajo se nutre de imaginarios alternativos, desafiando los cánones estéticos convencionales y develando las opacidades sociales que estos procesos de higienizacion ocultan.
“Mi obra no busca la contingencia como problema central, sino que explora un existir trágico y nihilista, mostrando la realidad como un campo de fuerzas en pugna”, explica Bravo.
A través de su corpus referencial, que aborda temas como la muerte, la violencia, el dolor y la destrucción, Víctor Hugo Bravo desafía la narrativa dominante que busca mantener una imagen pulcra y ordenada de la sociedad.
La estética del artista revela la irracionalidad y la violencia subyacente a las ideologías que moldean nuestra realidad contemporánea. Sus técnicas y medios, estratégicamente posicionados en los espacios de exhibición, buscan configurar un entorno visual que confronte y desestabilice las estructuras de poder establecidas.
“Es esencial para mí hacer del arte una forma de lucha contra las dinámicas de dominación y mercantilización imperantes”, enfatiza Víctor Hugo. Su enfoque confrontacional recuerda movimientos históricos como el expresionismo y el dadaísmo político, incorporando la agudeza del concepto para crear un discurso artístico que desafía y subvierte los cánones establecidos del arte.
Su obra no se limita al ámbito estético, sino que también actúa como una plataforma de resistencia cultural y política en América Latina. “Mi trabajo no solo confronta, sino que también propone nuevas maneras de pensar y entender la producción artística”, agrega, destacando la importancia de establecer un diálogo crítico y reflexivo en el entorno.
Con su propuesta estética y conceptual, Víctor Hugo Bravo se posiciona como una voz disidente que desafía las normativas impuestas y abre espacios para la reflexión profunda sobre las contradicciones y complejidades de la condición humana en la contemporaneidad.
Explorando las Fronteras del Poder y la Resistencia: Un Análisis de la Producción Visual de Víctor Hugo Bravo
En un ejercicio reflexivo profundo, Víctor Hugo Bravo ha identificado y articulado tres hitos fundamentales que impulsan su producción visual, revelando así un profundo compromiso con la crítica cultural y la resistencia frente a los sistemas dominantes.
En primer lugar, [Tu Nombre] examina meticulosamente las prácticas de higienización y blanqueamiento social, tácticas utilizadas por las entidades dominantes para perpetuar sus estructuras de poder. Referenciando a Foucault, el artista entiende que el poder no es simplemente algo que se posee o se toma, sino algo que se ejerce desde múltiples puntos de influencia, moldeando las realidades sociales y políticas.
En contraste con estas prácticas de poder, Víctor Hugo Bravo observa cómo estas acciones generan respuestas dialécticas, dando forma a sistemas marginales subversivos que desafían y critican el status quo establecido. Este proceso no solo revela las grietas en el sistema, sino que también propone nuevas realidades e imaginarios alternativos como herramientas de disidencia cultural y social.
El segundo hito destacado por Víctor Hugo es la organización de su obra visual como una trinchera conceptual. Esta organización no solo busca diferirse del sistema, sino también evadir las normativas establecidas, proponiendo una mirada crítica hacia la pasividad aparente y la aceptación acrítica de la realidad impuesta.
Finalmente confronta el paradigma neoliberal que, mediante procesos de higienización, busca invisibilizar y marginalizar cualquier expresión que cuestione la estabilidad del orden establecido. Este análisis se traduce en una práctica artística que no solo desafía sino que también reinventa sus propios símbolos y significados, proporcionando así una crítica contundente a los discursos hegemónicos y una exploración contínua de nuevas formas de expresión y comprensión del mundo contemporáneo.
Desde esta perspectiva crítica y comprometida, Víctor Hugo Bravo presenta su obra visual como un dispositivo estratégico que va más allá de lo estético, incorporando elementos existenciales e ideológicos que cuestionan y resisten las normativas impuestas. Esta propuesta de trabajo no solo redefine los límites del arte contemporáneo, sino que también desafía las narrativas establecidas sobre la cultura y la sociedad actual.
Espacio proyecto TRANQUILANDIA y TRANQUILAB
Bogotá, Colombia
Apertura 5 de Septiembre de 2024
Curaduría:
Santiago Rueda Fajardo, Colombia
Hernán Pacurucu Cárdenas, Ecuador